Reencuentro de amigas
Personal Reflexiones

Cincuenta años después: el reencuentro con mis amigas del colegio

Después de casi dos años de no visitar mi querido país, México, de manera inesperada se nos dio la oportunidad de ir por tres semanas en el mes de noviembre del pasado 2021; como siempre, por el trabajo de mi esposo. Para la gran mayoría de las personas, estos dos últimos años han sido un lapso de tiempo difícil de vivir y de sobrevivir, debido a la pandemia del COVID-19.

Tanto es lo que tenía que retomar con mi familia y amigos en este viaje, que dedicaré varios escritos a lo que fue mi estancia de tres semanas en mi querido San Luis Potosí, la ciudad donde crecí y estudié, conviviendo con familiares, vecinos, amigos y las amigas del colegio, esas con las cuales pasé largo tiempo, día a día, año tras año, y con quienes compartí las mismas alegrías por nuestros logros, así como algunas tristezas por los castigos o correcciones por parte de nuestros maestros.

A estas amigas dedico este artículo, pues me considero afortunada de haber podido reunirme con ellas después de cincuenta años de haber terminado nuestros estudios de bachillerato. Algunas de ellas fueron mis amigas desde la educación primaria, siempre en el mismo colegio, «El Welcome» o Instituto Hispano Inglés (IHI).

Amigas del colegio

Fue hace veinte meses que mi cómplice y mejor amiga en el colegio me contactó por una de estas redes sociales que se usan en la actualidad. Después de ponernos al día en lo referente a nuestras vidas, empezamos a recordar a nuestras compañeras y de esta forma mi querida amiga, Rosa Puyou, formó nuestro grupo de WhatsApp, en el cual a diario nos saludamos y estamos al día en temas de actualidad o en lo referente a nuestras vidas.

Tuvimos una videollamada para reconocernos y presentar a nuestras familias y luego otra para seguir platicando de nuestras vidas. Fue tan emocionante ver a esas «chiquillas» del colegio, ahora convertidas en mujeres profesionistas; unas jubiladas, otras aún activas, unas abuelas y otras en adorables tías consentidoras de sus sobrinos.

Así que aprovechando mi viaje a México nos pusimos de acuerdo para coincidir en persona en nuestro querido San Luis Potosí. Mi cómplice vive en otra ciudad, así que viajó para esta reunión tan especial, que se realizó el 26 de noviembre, la ultima semana de mi estancia en México. Yo propuse la fecha, pues quería estar con mis emociones estables, ya que debido a algunos sucesos tristes en mi entorno más cercano, necesitaba tiempo y espacio para poder retomar la realidad actual.

Recuerdos escolaresNo sé si alguien haya experimentado la emoción de reencontrarse, después de tantos años, con los compañeros de colegio. Para mi, que vivo en España, se me hacía un sueño hecho realidad, pues aunque no se conviva con las personas, las recuerdas con mucho cariño, porque los tiempos de escuela, creo, para la mayoría de las personas, son los mejores.

Estábamos en primer año de secundaria cuando María Teresa Fernández Narezo (Tere o TeFe, como le decimos de cariño), la Puyusa (Rosita Puyou) y yo, en un teatro hecho por nosotras en el jardín de la casa de Tere, presentamos la obra de Hansel y Gretel; vendimos los boletos de la entrada y preparamos palomitas para vender al publico asistente.

Para nosotras el éxito había sido rotundo, tanto que queríamos seguir en el ambientillo del teatro y hacer carrera en esta área, pero la realidad era que teníamos que poner atención a nuestros estudios, así que ni nuestros padres ni maestros apoyaron las inquietudes artísticas que teníamos ¡de ser actrices! Los castigos se dieron por estar distraídas en las clases organizando otras presentaciones, lo que nos hizo sentir incomprendidas en lo que considerábamos nuestra vocación.

Así que para mi todo se limitó a la presentación de Hansel y Gretel. Rosita Puyou sí estudió arte dramático y ha participado en varios cortometrajes, obras de teatro y anuncios. De TeFe, que le gustaba mucho el bossanova y tocaba la guitarra y el piano, no hemos vuelto a saber nada desde hace aproximadamente 30 años en que se fue a vivir a Estados Unidos, y siempre la recordamos con mucho cariño.

Muy corto fue el tiempo de nuestro reencuentro de amigas para contarnos nuestras vidas, recordar las convivencias interescolares, los novios o pretendientes, los apodos a los profesores, los recreos y los lonches de esos tiempos que perfumaban el salón de clases… ¡como la torta de huevo con chorizo!

Recordamos a las que eran especialistas en subirse la falda del uniforme y hacerlo minifalda, o se ponían jabón en los ojos para fingir que lloraban arrepentidas y así evitar un castigo. Los amores prohibidos, como el de mi cuñada Rosa Elia con mi hermano Pepe, ya que el es ocho años mayor que ella. En esa época ella con 14 y mi hermano con 22. Todos éramos tapaderas de sus reencuentros, y al final están casados con cinco hijos y cinco nietos. Les apodábamos entonces «Pepeo y Rosaelieta», por «Romeo y Julieta».

Alumnas Y cómo no recordar a las que siempre sacaban buenas calificaciones y nunca castigaban, o a las parlanchinas y cascabeles del grupo. ¡Ah, y a las que formamos el grupo de música y tocábamos guitarra y alguna vez nos presentamos en el Teatro de La Paz, de nuestro San Luis Potosí.

Recordamos, por supuesto, a las amigas que ya se nos adelantaron y disfrutan de otro plano, incluso rememoramos cómo era nuestra ciudad y las actividades y diversiones de aquella época, pues de lo que hablo pasó hace cincuenta
años o más.

Al estar todas reunidas era como si el tiempo no hubiera transcurrido, pues a pesar de nuestras canas, nuestros kilos de más o de menos, nuestros achaques de la edad, todas seguíamos siendo las mismas estudiantes adolescentes del Instituto Hispano Inglés.

Dedico con cariño este artículo a las estuvimos en este reencuentro, esperando que la próxima vez seamos más.

Claudia Azuara
Cachita Cerrillo
Chofis del Castillo
Lupitina Delgado
Pato Martínez
Luli Martínez
Umbe Ortiz
Rosita Puyou
Silvia Ramírez
Luz del Carmen Romo

También puede gustarte...

6 Comentarios

  1. Rosa Elia Bideau dice:

    Como siempre Comadrita relata todo con detalle que nos hace transportar a aquella época! Que linda amistad de ése trio !!

    1. Es un placer escribir esto recuerdos comadrita!!! Me rejuvenecen y me hacen sonreír.

  2. Claudia Azuara dice:

    Rocio que bonito escribes .
    Parece un cuento nuestra historia
    Pasamos unas horas felices recordando.
    Gracias por los ricos turrones Españoles que nos trajiste.
    Un abrazo con mucho cariño

    1. Fue un encuentro increíble! Nunca me imagine volver a vernos después de tantos años. Fue un verdadero placer el haber estado con ustedes querida Claudia. Abrazo con cariño!

  3. Lupitina Delgado dice:

    Al leerte me he transportado a esa época inolvidable de nuestra adolescencia. Volver a verlas fue increíblemente emocionante. Espero que se repita pronto.

    1. Fue un reencuentro tan bonito, tan rico de platicas y recordar nuestra adolescencia fue uno de los mejores regalos del 2021. Primero Dios, repetiremos!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *